Devocional
Jeremías 31:31-34
Por Andrés Chinchín

 

Dios se identifica a sí mismo como un marido fiel para su pueblo. Él los persigue y no permite que la maldad y el pecado sean un impedimento para su relación; más bien, él promete limpiarles el corazón y borrar por completo sus errores a través de un nuevo pacto. Spurgeon dice “Las cosas requeridas por la ley son otorgadas por el evangelio. Dios demanda obediencia bajo la ley: Dios obra la obediencia bajo el evangelio. La santidad nos la pide la ley: la santidad la obra en nosotros el evangelio”.

 

Para pensar:

“He aquí que vienen días, dice Jehová, en los cuales haré nuevo pacto con la casa de Israel y con la casa de Judá” (Jeremías 31:31).

 

Oración:

Gracias Señor por tu misericordia y tu perdón. Ayúdame a caminar en la confianza de tu pacto hacia mí por la obra de Cristo Jesús.

Amén