Devocional
Romanos 8: 26-30
por Andrés Chinchín

 

“Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados” (Romanos 8: 26-30).

 

En muchas ocasiones estamos muy débiles a causa de nuestra rutina diaria y de la vida en general. Es en eso momentos en los que el Señor nos invita a su presencia para ser fortalecidos en él, teniendo la plena confianza que su Santo Espíritu está intercediendo por nosotros y nos, y articulando nuestras peticiones al Padre.

Además, sea cual sea nuestra circunstancia podemos estar seguros de que Dios está trabajando en todo para nuestro bien y para su gloria.

 

Para pensar:

Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas; porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga. (Mateo 11:28-30)

 

Oración:

Gracias Señor por tu amor, y por tu Santo Espíritu que intercede por mí. Ayúdame a tener paz y confianza, sabiendo que tú estás trabajando en mi vida.

Amén